N e l s o n   S a l i n a s   S o t o

L a   P o e s í a   N a c e   e n   l a   I n t i m i d a d   M á x i m a


 

Nelson Salinas Soto, es poeta Chileno.  Nace en Santiago un 27 de abril de 1982. Estudia, sin ser un alumno destacado, en el Colegio San Marcos ubicado en la comuna de Macul. Sus estudios superiores los realiza sin terminarlos en bajo eléctrico en el instituto Pro Jazz y de ingeniería comercial en la universidad Mayor. En año 2006  abre su rincón al mundo http://desdoblamientointelectual.blogia.com , en una forma de explosión y entregar el arte que le pertenece a todo el mundo y no sólo dejarlo para él….ya los cuadernillos rayados se convertirían en palomas mensajeras a disposición del que las quisiese.

 

Decide a principios del 2007  dejar Chile e ir en busca de respuesta al extranjero. Llega a Sydney, Australia para estudiar Inglés por cerca de un año y luego viajar a conocer la isla blanca de Ibiza, España, donde se llena del más puro arte. Vuelve a Chile en septiembre del 2009 para reencontrase con su suelo querido y sentirse por hoy satisfecho de estar en el lugar que lo vio nacer y más maduro como poeta.

 

A través del viaje por la web le planteamos algunas preguntas y aprovechamos de mostrar a ustedes algo de su trabajo literario.

 

¿Qué es para ti la poesía?

 

Bueno poesía es eso que no entiendo, es eso que me hace cantar en los momentos más extraños, mi poesía me sorprende a mí mismo, es simplemente como si dentro de mi existiera una fuerza incontrolable de hacer poesía  con otro lenguaje, con otro forma de ver las cosas y ocupara mi ser para expresarse.

 

¿Cuándo y cómo te decidiste a escribir poesía?

 

Creo que esto es algo con lo que nace, y recuerdo muy de niño inspirándome y sintiendo las cosas de otra forma. Claro cuando uno ya empieza a madurar se da cuenta que esta cosa se llama poesía aunque no sé si lo que hago es poesía. El día que en cierto modo le doble la mano a la vergüenza y decidí ser responsable con mi arte y vivir de lo mejor con esto empieza mi vida como escritor si a si puede llamarse.


¿Qué esperas entregar a los demás con tus versos?

 

Pienso que los poetas y hablo de todos los poetas del mundo se sienten un poco solos, y no hablo de ese cliché también poético de ver al poeta como un ser encerrado al mundo, si no que la poesía al ser delicadamente personal tiene de igual forma la finalidad de ser dicha, mostrada y estar a disposición de todos, es un verdadero lenguaje la poesía y nace en la intimidad máxima. Es por lo mismo que pienso que cada persona puede ser poeta, mucha gente se guarda poesía por temor  y creo que acá esta lo que realmente me hace escribir, simplemente entregar lo que le pertenece a los oídos del mundo y que la gente se dé cuenta que la poesía está por todos lados y solo basta con atreverse a escribir lo que se siente.

 

¿Sirve de algo la poesía o es sólo el inútil de la familia?

 

Claro dentro de lo difícil que puede ser para el poeta sentirse poeta, están las barreras sociales por a si llamarlo que presionan para llevarte por los caminos regulares. Creo firmemente en la capacidad del ser humano por ser feliz, fabricar sus propios castillos en los lugares que quiera y con las herramientas que este desee. Como las artes la poesía explota en personas que ciegamente creen en esta, se hacen los sordos y viajan con su espíritu. El que nació poeta morirá poeta siendo reconocido o pasando desapercibido. Acá esta la gran finalidad de esta, para mi es tan importante como respirar, sin ella no existo, si la quito de mi vida dejaría de ser el que soy.

 

¿Cuáles son tus influencias literarias?

 

El haber nacido en un país lleno de grandes poetas es muy placentero. Además considero a la gente Chilena poeta por naturaleza e inventores de grandes frases, por lo mismo voy siempre con papel y lápiz. Uno encuentra poesía en cada rincón de la calle, escuchando a los niños, mirando la naturaleza,  juntándose con amigos o simplemente abriendo un poco los ojos y dejando los oídos atentos.

Tengo que confesar que no soy un gran lector muy por el contrario soy un poco perezoso y no le doy mucho tiempo a un libro si este no me llena en su principio. Además  trato de tener las menos influencias posibles   para que mi poesía sea propia y me nazca de la forma más natural, además respeto mucho a los escritores y las líneas que guardan sus libros. No puedo dejar de mencionar la gran obra de Hermann Hesse  "Siddhartha", un libro hecho para mi vida el cual llevo a todo lados , pero sin duda el poeta que me llena el corazón de magia y lo encuentro el mejor poeta que jamás existirá es Pablo Neruda, que lejos estamos los que nos creemos poetas de Pablo Neruda.

 


Poemas de Nelson Salinas Soto


 

Patas de Fierro

 

Cuando pasa el patas de fierro todo se detiene para admirarlo, bandereros le saludan agitando sus banderas diciéndole en su lenguaje hasta pronto, niños se deslumbran del espectáculo que perciben sus ojos y el patas de fierro ronco con voz metálica les dice adiós.

 

Cierro mis ojos y me imagino con gorro y bigotes siendo el conductor con vista panorámica hacia el futuro del pasado, manteniéndome en los rieles de mis pensamientos de trenes, vislumbro el paisaje de antaño y comprendo historias que guardan los patas de fierro.

 

Hago sonar el silbato milagroso del aquí estoy, miro por sus pequeñas ventanas visionarias, enmarcadas del metal y comprendo que los patas de fierro pasan por el corazón del pueblo y se detienen en las estaciones de la rareza del adiós.

 

Miro por sus espejos y veo la majestuosidad de sus carros, la incomprensión de sus ruedas y la quietud de su armazón. Tantas puertas, tantos comedores, tantos asientos esperando al viajante, al viajante romántico, al viajante abatido, al viajante que entra en el alma del patas de fierro.

 

En los destinos del patas de fierro se ven lágrimas apretadas por besos y sonrisas estiradas por las manos y el patas de fierro descansa su continuidad encerrada, pidiendo reposo, pidiendo rieles infinitos. El patas de fierro pronto dejará la estación perdida y buscara su próximo destino, con boletos de ida y vuelta o con boletos de hasta nunca más nos veremos.

 

Oh,patas fierro columna vertebral de los montes y ciudades, ¿Qué escondes en tu regocijo de humo y en tu lenguaje afilado, que me tienes anonadado con tu  presencia altiva?

 

Oh, patas de fierro, sangre del carbón, viajas por escaleras acostadas,  por los serafines paisajes que adornan tu presencia noble y yo lleno de ira te trato de alcanzar con mi imagen y no me esperas.

 


 

Ser Poeta Yo

 

Presentes destinatarios, elocuentes de la vida, domadores de sueños y calaveras encendidas.

 

Aquellos que son del aire, del suelo y del trombón, también los locutores, los adyacentes y los cabezas afirmativas.

 

Prepárense para entrar en sintonía, en la sintonía fina, en el puente colgante, en el silabario la de vida y en el juego del pecado.

 

Pónganse cómodos y siéntanse como en su casa, preparen ese café negro y endulcen su paladar con el giro pragmático del ser poeta yo.

 

Ser poeta yo mientras me mantengo en los rincones y en las esquinas, me es imposible, infinitamente imposible dejar de ser poeta.

 

La culpa la tienen las flores, las coloridas, las marchitas y las que quieren ser flores, también los cepillos de dientes, esos cepillos orgullosos de ser cepillos y esos abandonados pobres despeinados agonizando. ¿Por qué no la cordillera blanca inmensa pecho de la tierra, que se poso en mi ventana para no irse jamás? El mar también es culpable con su oleaje sereno, con su hipocresía hecha horizonte y su estallido de vida en su azul pulcro.

 

Ser poeta yo y no dejar de admirar es no ser poeta, como no atreverme a gritar de delirio ante las sonrisas de los niños, valientes, sonrientes, pequeños alegres y llorones también. Ante esos enamorados de la mano afirmando el cariño con esos ojos envenenados de pasión infinita, como dejar de lado al cielo, magnifica poesía viva que despierta las vistas y enorgullece a los soñadores, a los pájaros increíbles seres planeadores de la lejanía, a los perros con ojos de perro que hablan con sus ojos y a las lagartijas amigas que asolean la quietud viva.

 

Ser poeta yo es un laberinto sin retorno, una canción sin coro y una telaraña que junta los sentidos, me quedo detenido admirando el susurro, compartiendo el aire y extrayendo de mi ser los pensamientos mas alocados, que envuelven mi vida y me hacen sentirme poeta.

 

Las bicicletas abandonadas, los racimos de uva,  los cigarros mal apagados en ceniceros congestionados de tabaco, las moscas de colores,  la lluvia melancólica amiga del rayo de sol apacible, las alfombras cariñosas, las almohadas que guardan secretos, los espejos monovalentes, las peinetas que pierden dientes y se resignan al jubilar.

 

Pero son los balcones, los magníficos grandes y pequeños balcones los que me hacen ser poeta, las maravillosas mariposas y porque no las ventanas amigas mías son las ventanas. Las chimeneas estallando de calor, los vasos quebrados, las botellas vacías y los muebles empolvados.  Las estrellas esas sí son las culpables, el otoñó como olvidarme del otoño y como olvidarme que simplemente soy poeta porque me gusta todo y amo la simplitud que esconde la grandeza de vivir siendo poeta.

 

Ser poeta yo, es un viaje directo al centro del centro y al extremo del extremo, no entiendo aún si soy poeta o simplemente quieren que yo lo sea.

 


 

Ojitos Negros

 

Ojitos negros que me quieren llevar pa`lante,

Que me piden vivos cariño,

Que me miran profundos y fieles,

Que me hacen sonreír con miedo.

 

Negro son tus dos ojos como la noche más negra, pero como la más tierna de las noches me miran tus ojos,

Tu cara blanca e irreprochable, tu sonrisa artística que me deja entumecido al desconocer que existía la dicha de la sonrisa,

Tus labios carnosos, inflados, perfectos, inmaculadamente perfectos, como adoro tus labios.

 

Es la posesión de tu mirada oscura, de tu alegría blanca,

De tu ternura infinita, de tu penetrante ternura angelical, la que me desea sin pestañar en ningún momento,

La que me acaricia con detalle, con quietud,

La que me hace perderme en tus ojos negros y caer en tus labios, ahogándome en ellos y no pidiendo rescate alguno.

 

Me doy cuenta que sin vuelta atrás tus ojos negros llegaron para no retirarse,

Quisieron para no dejar jamás y me miran desde lejos no quitándome nunca su mirar de ojos negros,

Es que están por todos lados tus ojitos negros  tiernecitos, pidiendo espacio en mi corazón, aferrado a la incógnita del vocabulario del amor más sincero.

   

He viajado a la luna, he pasado por las estrellas y me he detenido en tu cuerpo,

En la nada del tiempo, me he convertido en un observador de tus ojos negros, los cuales parecen inmensos portales en tu cara, tormentas en tus deseos, y primaveras sobre las sabanas blancas adormecidas y apacibles por tus ojos negros.

 

Ojos negros intranquilos, inquietantes, telescopios vivos de tu vida, calidoscopios de tus sus sueños simples,

Entran en mi vida cuando más lo necesito, cuando menos lo esperaba, cuando más lo quería,

Ojitos negros, delicadamente negros, agonizan de deseo en mis ojos tartamudos y se los llevan a pasear por los caminos que iluminan tus ojos negros.