I N G R I D   C Ó R D O V A

L A   P O E S Í A   E S

 

U N   A C T O   C O L E C T I V O

 


 

 

 

 

 

Nacida en Santiago de Chile, profesora de Lenguaje y Literatura, Gestora Cultural y Poeta organizadora del Colectivo Poético “La Guarida”.  Durante 25 años imparte clases en el Colegio Latinoamericano de Integración; además de realizar talleres literarios para jóvenes y adultos en diversas organizaciones del centro y la periferia de la capital.  Su trabajo ha sido publicado en diversas revistas literarias.

 

Su poesía recorre, básicamente, dos derroteros: poesía social y poesía erótica.

 


 

¿Qué te impulsó a entrar en el mundo de la literatura?

La entrada a la poesía fue muy tempranamente, aprendí a leer antes de ir al colegio, en aquellos tiempos se ingresaba a la institucionalidad educativa ya grandecitos. Mi madre me enseñó en casa y solía leerme desde un libro azul de tapas duras, algo que llamaba poemas; extraña y antigua costumbre, que hoy ya casi no sé ve. A los 6 años recitaba de memoria “Cultivo una Rosa Blanca” de José Martí y de ahí nace la necesidad de “decir”, de buscar palabras para “contar” lo que no se ve a primera vista; eso que se siente, se piensa, se sueña en algún lugar del cuerpo o la mente. La expresión de la tensión constante que el mundo cotidiano y el mundo interno provocaban en mí, encuentran en la literatura su cuestionamiento y su respuesta. En definitiva, necesidad vital, pura y llana necesidad vital de decir.

 

¿Cuál es tu visión sobre la poesía?

La creación poética es, para mí, una forma de habitar el mundo y sus contradicciones. Una expresión de la subjetividad más profunda, pero que no se agota en el individuo, sino que se vincula y aúna con otras subjetividades, conformando cosmovisión, creando mundo. Por eso, elijo hacer poesía desde el cuerpo, como expresión material que habita distintos espacios y contextos junto a otros, porque la poesía es, en definitiva, un acto colectivo, donde un alguien escribe y los Otros hacen y recrean el discurso inicial hasta apropiárselo. Al menos, así me gustaría que ocurriera con lo que escribo.

 

 


 

 

 

 

 

 

 

 

 


 

 

¿Qué papel le confieres al escritor (al artista en general) dentro de la vida política y social?

Partamos diciendo que no creo en lo que yo llamo “arte de los iluminados”, es decir, en ese tipo de arte exento de toda influencia y que busca el goce estético “per se”. El arte nace desde un Ser Humano que no se encuentra en un limbo de las ideas exclusivamente; que vive, habita, construye y se construye, deconstruye y se deconstruye, mil veces, en espacios concretos: el cuerpo, la comunidad, el ámbito social y sus expresiones institucionales o no institucionales. Desde allí, el arte y la poesía; la palabra poética se vuelve intrínsecamente social y profundamente política, en la más exacta de sus acepciones. Entonces, según mi opinión, el rol del artista, del poeta consiste en asumir su condición de Ser Humano a cabalidad y develar los claro-oscuros de las cosmovisiones que constituyen a los diferentes espacios de expresión humana. Si eso no es un acto social, un acto político, la pregunta es: ¿para qué escribir?

 

¿Cuáles son los referentes literarios o extraliterarios que influyen en tu poesía?

A partir y en consonancia con lo expresado anteriormente, todas aquellas manifestaciones que tienden a cuestionar, problematizar y develar el devenir de Ser Humano, se han constituido en mis referentes.

En lo literario, autores y corrientes como el Márques de Sade, Los Malditos Franceses, El Romanticismo alemán, la “Trummerliteratur”, el Teatro del Absurdo y posteriormente el Teatro de la crueldad y la corriente “In yer face”, produjeron un fuerte impacto en esta visión de mostrar a través de la palabra aquello que se esconde tras “tras las cortinas” de la sociedad “correcta”; aquello que no se quiere ver, ni cuestionar, ni siquiera mencionar, pero que existente y se hace presente en las cosmovisiones personales y colectivas.

En esa misma línea, la música ha sido otro gran referente a través del rock y  el punk especialmente, con ese discurso frontal que se hace oír, a pesar o quebrando los silencios.

Los movimientos políticos y sociales, de denuncia y construcción de nuevos paradigmas, abiertamente confrontados con la visión capitalista y posteriormente neoliberal, así como también el discurso de género, en oposición a las concepciones patriarcales, forman parte sustancial de mi visión y construcción del mundo y por lo tanto se encuentran como fundamento de mis motivaciones para querer escribir, para llegar a “decir” como alguna vez anhele desde niña.