L O S   F R A G M E N T O S

D E   H E R Á C L I T O


T r a d u c c i ó n   d e   L u i s   F a r r é

   

 

 

Sabemos poquísimo de la vida de Heráclito, llamado "El Oscuro" por sus conciudadanos.  Tampoco se han establecido con certeza ni la fecha de su nacimiento ni de la de su muerte.  El apogeo de su pensamiento habría sido alrededor del año 500 a.C.  Las escasas informaciones que hay acerca de su vida y de su obra nos han llegado gracias a Diógenes Laercio, pero muchas de estas noticias son discutibles.  Con toda seguridad perteneció a la nobleza de Efeso e, incluso, parece que renunció a favor de su hermano a la condición de rey nominal de la ciudad.  Los nobles de Efeso miraban con simpatía el dominio de Darío, rey persa, sobre esa colonia, en contraposición al pueblo, al cual, por lo demás, Heráclito menospreciaba profundamente.

 

Se han reunido 126 sentencias (fragmentos), parte de una obra que Diógenes le atribuye: "De la Naturaleza", y que habría estado dividida en tres secciones:  una acerca del universo; otra, acerca de la política, y una tercera, de teología.  Sin embargo, más de un estudioso tiende a afirmar que Heráclito no habría escrito nada y que "las sentencias" son condensaciones, interpretaciones, deformaciones a veces, del pensamiento oral del maestro.

 

Murió tratando de aplicar a la hidropesía "su principio de contrariedad": se enterró a fin de curar lo húmedo de su enfermedad con la virtud de lo seco, con lo que sólo consiguió, según Diógenes, apresurar su muerte.  (Humberto Giannini).

 

La traducción que entregamos a ustedes fue realizada por Luis Farré en a principio de la década de 1960.


 

 

 

1

No obstante de que esta razón es siempre verdadera, sin embargo los hombres son incapaces de comprenderla cuando la oyen por primera vez, y aun después de haberla oído en alguna forma.  Porque, a pesar de que todas las cosas están sometidas al devenir de acuerdo y razón, parece como si los hombres no tuvieran de ello ninguna experiencia, cuando seleccionan palabras y hechos tal como lo expongo, dividiendo a cada una de las cosas de acuerdo a su clase y manifestando cómo es verdadera.  Pero otros hombres ignoran lo que hacen cuando están despiertos, así como lo que hacen en el sueño.

 

2

Debemos seguir lo común; sin embargo, a pesar de que la razón es lo común, los más viven como si fueran poseedores de sabiduría propia.

 

3

El sol tiene la anchura del pie humano.

 

4

Si la felicidad consistiera en los placeres del cuerpo, llamaríamos felices a los bueyes cuando encuentran algarrobas para comer.

 

5

En vano se purifican si se ensucian con sangre, como si uno que hubiera andado entre el barro quisiera lavar sus pies con barro.  Cualquiera que lo viera haciendo esto, lo consideraría necio.  Y ellos oran a imágenes de dioses como si alguien pudiera conversar con cosas fabricadas, pues no conocen a los dioses y héroes tal como son.

 

6

El sol es nuevo cada día.

 

7

Si todas las cosas se volvieran humo, las narices las distinguirían.

 

8

Lo contrario se pone de acuerdo; y de lo diverso la más hermosa armonía, pues todas las cosas se originan en la discordia.

 

 

 

9

Los asnos preferirían la paja al oro.

 

10

Son uniones:  lo entero y lo no entero, lo concorde y lo discorde, lo consonante y lo disonante, y del todo uno y del uno todo.

 

11

Todo lo que se arrastra está custodiado por el rayo de Dios.

 

12

Diversas aguas fluyen para los que se bañan en los mismos ríos.  Y también las almas se evaporan de las aguas.

 

13

Los cerdos se satisfacen en la inmundicia antes bien que en el agua pura.

 

14

A los que contemplan la noche, a los magos, a las Bacantes, a las Ménades, a los iniciados:  en las cosas que según los hombres son misteriosos, se inicia sin consagración.

 

 

 

15

Porque si no hicieran una procesión en honor a Dionisio y no cantaran el himno fálico,  actuarían muy vergonzosamente.  Pero el Hades es lo mismo que Dionisio en cuyo honor enloquecen y deliran.

 

16

¿Cómo puede uno ponerse a salvo de aquello que jamás desaparece?

 

17

Muchos no lo comprenden, aunque se encuentren con ello, ni lo entienden, cuando lo aprenden;  pero se imaginan comprenderlo.

 

18

Si no se espera, no se encontrará lo inesperado; puesto que lo inesperado es difícil y arduo.

 

19

No saben ni cómo atender ni cómo hablar.

 

20

Una vez nacidos, desean vivir y dar con su destino –o mejor descansar- y dejan tras de sí hijos para que engendren otros destinos.

 

21

Muerte es todo lo que vemos, cuando estamos despiertos; mas lo que vemos estando dormidos, es sueño.

 

22

Los buscadores de oro cavan muy hondo en la tierra y hallan muy poco.

 

23

No sabrían el nombre de justicia, si no existiesen estas cosas.

 

24

Dioses y hombres honran a los caídos en la guerra.

 

 

25

A las grandes penas corresponden mayores recompensas.

 

26

El hombre prende una luz para sí mismo durante la noche, cuando ha muerto, pero todavía vive.  El soñador, cuya visión ha sido suprimida, ilumina desde la muerte; el que está despierto, ilumina desde el ensueño.

 

27

A los hombres les aguardan cuando mueren tales cosas que ni esperan ni imaginan.

 

 

28

El mejor de entre ellos no conoce sino opiniones, y las retiene firmemente; sin embargo, la justicia descubrirá a los engendradores y testigos de falsedades.

 

 

 

29

Los mejores prefieren a todo una cosa: el honor sempiterno a lo mortal.  Los más se hartan como animales.

 

30

Este mundo, que es el mismo para todos, no lo hizo ningún dios o ningún hombre; sino que fue siempre, es ahora y será fuego siempre viviente, que se prende y apaga medidamente.

 

31

Transformaciones del fuego: primeramente el mar, pero del mar una mitad de tierra, la otra mitad soplo ardiente.

 

32

Lo uno, el único sabio, quiere y no quiere llamarse con el nombre de Zeus.

 

33

Se llama ley también el someterse a la voluntad de uno solo.

 

34

Los tontos cuando oyen son semejantes a los sordos:  sobre ellos es la sentencia de que están ausentes cuando presentes.

 

35

Los hombres que aman la sabiduría deben estar familiarizados con muchas cosas.

 

 

 

36

Porque es muerte para las almas el convertirse en agua, y muerte para el agua el convertirse en tierra.  Pero el agua procede de la tierra; y del agua, el alma.

 

37

Los cerdos se lavan con lodo, las aves de corral con polvo o ceniza.

 

38

Según algunos, Tales fue el primero en escudriñar las estrellas.

 

39

En Priene vivió Bías, hijo de Teutames, cuya reputación es mayor que la de los otros.  Los Prieneses le consagraron un recinto sagrado llamado Teutameno.

 

40

El aprendizaje de muchas cosas no enseña a comprender, de lo contrario hubiera adoctrinado a Hesíodo y Pitágoras, y luego también a Jenófanes y Hecateo.

 

41

La sabiduría es una sola: conocer la razón, por la cual todas las cosas son dirigidas por todas.

 

42

Homero debería ser suprimido de los certámenes y vapuleado, lo mismo que Arquíloco.

 

43

Conviene más extinguir la insolencia que un incendio.

 

44

El pueblo debe luchar por la ley como por sus murallas.

 

 

 

45

No hallarás los límites del alma, no importa la dirección que sigas, tan profunda es su razón.

 

46

Enfermedad sagrada al propio juicio y falaz la visión.

 

47

No juzguemos superficialmente sobre las cosas máximas.

 

48

El nombre del arco (βιός) es también vida (βίος); pero su obra es la muerte.

 

49

Uno para mí es como diez mil, con tal que sea el mejor.

 

49a

Entramos y no entramos en los mismos ríos, somos y no somos.

 

50

Si atienden no a mí, sino a la razón, estarán de acuerdo en que la sabiduría consiste en que uno es todo.

 

 

 

51

Los hombres ignorar que lo divergente está de acuerdo consigo mismo.  Es una armonía de tensiones opuestas, como la del arco y la lira.

 

52

El tiempo es un niño que juega con los dados; el reino es de un niño.

 

53

La guerra es el padre y el rey de todas las cosas.  A algunas ha convertido en dioses, a otras en hombres; a algunas ha esclavizado y a otras ha liberado.

 

54

La armonía no manifiesta es superior a la manifiesta.

 

55

Las cosas que más aprecio son las que veo, oigo y aprendo.

 

56

En cuanto al conocimiento de las cosas visibles los hombres son engañados como Homero, quien sin embargo era el más sabio de todos los helenos.  Pues también a éste engañaron jovencitos matadores de piojos, cuando decían:  todo lo que hemos visto y apresado, lo soltamos; mas lo que no hemos visto ni apresado, lo llevamos con nosotros.

 

57

Hesíodo es el maestro de los más.  Creen que sabía mucho, cuando no conocía ni el día ni la noche.  Éstos son uno.

 

58

El bien y el mal son uno.

 

59

El camino de las hélices del batán, recto y curvo, es uno y el mismo.

 

60

El camino hacia lo alto y el camino hacia lo bajo es uno y el mismo.

 

 

 

61

El mar es el agua más pura y la más impura.  Para los peces es potable y buena; para los hombres, impotable y fatal.

 

62

Los inmortales son mortales y los mortales inmortales, viviendo aquellos la muerte de los otros, y muriendo los otros la vida de aquellos.

 

63

Resucitan y se convierten en vigilantes de lo vivo y de lo muerto.

 

64

El rayo gobierna todas las cosas.

 

65

(El rayo) deficiencia y saciedad.

 

66

El fuego al avanzar juzgará y condenará todo.

 

67

Dios es día y noche, invierno y verano, guerra y paz, hartura y hambre; pero adopta diversas formas, al igual que el fuego, cuando se mezcla con especias, que toman el nombre de acuerdo a la fragancia de cada una de ellas.

 

 

 

67a

Así como la araña, que está en el centro de la tela, siente de inmediato cuándo una mosca destruye alguno de sus hilos y corre rápidamente allí como doliéndose del corte del hilo, así el alma del hombre lesionada en alguna parte del cuerpo se dirige rápidamente allí turbada por la lesión del cuerpo, al cual está unida firme y proporcionalmente.

 

68

Él (Heráclito) denomina remedio a los usos más vergonzosos del culto de los misterios.

 

69

Hay que distinguir dos modos de holocaustos.  Unos son utilizados por hombres del todo purificados internamente, como puede ocurrir a veces según Heráclito, o por algunos escasos hombres fáciles de enumerar.  Los otros son materiales.

 

70

Las opiniones humanas son juego de niños.

 

71

El hombre debe acordarse del hombre, que olvida dónde conduce el camino.

 

72

Con la razón, con la cual anda de continuo la mayoría de las veces, está en enemistad; y las cosas con que tropieza diariamente, le parecen extrañas.

 

73

No es conveniente el obrar y el hablar como hombres dormidos.

 

74

Niños al estilo de nuestros padres, lo que ellos nos han dicho.

 

75

Los que están dormidos son compañeros de trabajo de aquello que en el mundo se produce.

 

 

 

76

El fuego vive de la muerte del aire, y el aire de la muerte del fuego; el agua vive de la muerte de la tierra, y la tierra de la muerte del agua.

 

77

El convertirse en agua para las almas es gozo o muerte.  Cada uno de nosotros vive de la muerte de aquellas (las almas) y éstas viven nuestra propia muerte.

 

78

La naturaleza humana no tiene conocimiento, pero sí la divina.

 

79

La divinidad llama niño al hombre, en la misma forma que el niño en comparación al hombre.

 

80

Debemos saber que la guerra es común a todos y que la discordia es justicia y que tosas las cosas se engendran de discordia y necesidad.

 

81

Pitágoras, abuelo de la charlatanería.

 

 

 

82

El más hermoso de los monos es feo comparado con la raza de los hombres.

 

83

El más sabio de los hombres parece un mono al comparárselo con Dios en sabiduría, en belleza y en todas las otras cosas.

 

84a

Cambiando descansa.

 

84b

Es fatigoso trabajar para los mismos y obedecerlos.

 

85

Es difícil luchas con el propio ánimo.  Lo que anhela, lo compra a cuenta del alma.

 

86

Casi todo lo divino se sustrae al conocimiento por falta de fe.

 

87

El indolente se asombra de cualquier palabra.

 

88

Es siempre uno y lo mismo en nosotros, lo vivo y lo muerto, lo despierto y lo dormido, lo joven y lo anciano.  Lo primero se transforma en lo segundo, y loo segundo en lo primero.

 

89

Hay un mundo uno y común para los que están despiertos, pero el que duerme se reduce a un mundo propio.

 

90

Todas las cosas se cambian en fuego y el fuego en todas las cosas, así como las mercancías por oro y el oro por mercancías.

 

 

 

91

No se puede sumergir dos veces en el mismo río.  Las cosas se dispersan y se reúnen de nuevo, se aproximan y se alejan.

 

92

Y la Sibila, con labios delirantes, diciendo cosas melancólicas, carentes de adorno y sin unción, con su voz se hace oír miles de años, gracias al dios que está en ella.

 

93

El señor de quien es el oráculo de Delfos ni expresa ni oculta su significado, sino que lo manifiesta mediante señales.

 

94

El sol no sobrepasará sus medidas.  De lo contrario, las Erinias, servidoras de la justicia, lo descubrirán.

 

95

Es mejor ocultar la ignorancia, pero es difícil en aflojamiento y en el vino.

 

96

Los muertos deberían arrojarse pronto como basura.

 

 

 

97

Los perros ladran a aquellos que no conocen.

 

98

Las almas huelen al Hades.

 

99

Si no hubiera sol, a causa de los demás astros existiría la noche.

 

100

…las estaciones que producen todas las cosas.

 

101

Yo me escudriñé a mí mismo.

 

101a

Los ojos son testigos más preciosos que los oídos.

 

102

Para el Dios todas las cosas son hermosas y buenas y justas; pero los hombres sostienen que algunas cosas son injustas y otras justas.

 

103

Son comunes el principio y el fin en la circunferencia del círculo.

 

104

¿De qué les sirve el pensamiento y la sabiduría?  Obedecen a poetas populares y las multitudes son sus maestros, ignorando que la mayoría son malos, y los menos son buenos.

 

 

 

105

Homero es un astrólogo.

 

106

Un día es igual a otro.

 

107

Malos testigos son los ojos y los oídos para los que tienen alma de bárbaros.

 

108

De aquellos cuyos discursos he oído, ninguno hay que alcance a comprender que la sabiduría está separada de todo.

 

109

Es mejor ocultar la ignorancia, pero es difícil en aflojamiento y en el vino.

 

110

No es mejor para los hombres lograr todo lo que desean.

 

111

Es la enfermedad lo que hace agradable la salud; el mal, el bien; el hambre, la saciedad; el cansancio, el reposo.

 

 

 

112

Ser sensato es la máxima virtud; y es sabiduría decir la verdad y obrar de acuerdo con la naturaleza.

 

113

El pensar es común a todos.

 

114

Aquellos que hablan con entendimiento deben adherirse firmemente a lo que es común a todos, como la ciudad se adhiere firmemente a sus leyes, y aun con más vigor.  Pues todas las leyes humanas se alimentan de una, la divina; ésta manda cuando quiere, basta a todos y las supera.

 

115

Pertenece al alma una razón que está en crecimiento continuo.

 

116

Está en poder de todos los hombres conocerse a sí mismos y ser sensatos.

 

117

El hombre, cuando está beodo, es conducido por un muchacho imberbe, Tambaleándose, ignorando donde pone los pies, con el alma humedecida.

 

118

El alma seca es la más sabia y la mejor.

 

 

 

119

Su carácter es demonio para el hombre.

 

120

La osa es el límite de la aurora y el ocaso, y lo contrario a la osa el mojón del brillante Júpiter.

 

121

Todos los efesios adultos harían muy bien en colgarse, y dejar la ciudad a los muchachos imberbes, porque expulsaron a Hermodoro, el mejor de sus hombres, diciendo: "No habrá nadie que sea el mejor entre nosotros; si el tal existe, que esté en cualquier otra parte y entre otras personas".

 

122

Aproximación

 

123

La naturaleza aprecia el ocultarse.

 

 

 

124

El orden cósmico más bello como basura esparcida al acaso.

 

125

También el brebaje se descompone, si no se le agita.

 

125a

La riqueza no os debería jamás faltar, oh efesios, puesto que vuestra inferioridad es manifiesta.

 

126

Lo frío se calienta, lo cálido se enfría, lo húmedo se seca, lo seco se humedece.